Ronald Alfaro Redondo, investigador del Eje de Cultura Política y Opinión Pública del CIEP, participó en la obra escribiendo un capítulo titulado “Tensions and Uncertainty in Latin America’s Most Stable Democracy”. Este apartado argumenta que si bien es cierto que la democracia costarricense sigue estando fundada en bases sólidas y resistentes, nuevos espacios se han abierto para renovadas y crecientes disfuncionalidades y vulnerabilidades, haciéndola propensa a retrocesos democráticos. A pesar de ésto, los diferentes actores del sistema político no han recurrido a medidas que terminen amenazando el sistema político aún. Pero, si el país no enfrenta retos de desarrollo ligados a la educación, la desigualdad social, el desempleo, la productividad, la protección ambiental y el fortalecimiento de la democracia, se arriesga a avanzar por un escenario sumamente destructivo, en especial luego de las vulnerabilidades expuestas por la crisis socioeconómica y de salud de la COVID-19.