Lunes 08 de julio del 2024

I Boletín Especial 2024

Análisis del Debate Presidencial de CNN 2024

El debate presidencial entre Joe Biden y Donald Trump, celebrado el 27 de junio en la cadena CNN, refleja una profunda polarización política que atraviesa Estados Unidos con las candidaturas de dos Presidentes que se enfrentan a la posibilidad de su segundo mandato; lejos de un intercambio constructivo de propuestas y soluciones a los desafíos del país este estuvo dominado por ataques personales, acusaciones cruzadas y la evasión discursiva de temáticas y preguntas clave realizadas.

El debate, propiciado por el partido demócrata para impulsar la campaña Biden, ya cobra efectos por el pobre desempeño del Presidente en ejercicio en el espacio. La profunda crisis en la que está sumida el partido demócrata responde a los cuestionamientos sobre si el Presidente debe continuar como candidato presidencial o si puede ser reemplazado de cara a la convención demócrata a realizarse del 19 al 22 de agosto. Esta se pone en evidencia en declaraciones públicas que han realizado tanto financistas como aliados históricos del partido.

Según la más reciente encuesta de The New York Times/Siena College Trump amplió su ventaja en la carrera presidencial y ahora, el candidato republicano supera por seis puntos porcentuales a Biden. En la consulta sobre la afirmación Biden es muy viejo para ser un Presidente Ejecutivo” el 74% de las personas encuestadas coincidieron, frente al 69% medido anteriormente y frente al 36% reportado en la elección de 2020. Más allá de las formas, que han sido materia de foco internacional, desde el Observatorio de los Estados Unidos repasamos en este boletín especial los temas de fondo que el debate propuso a la ciudadanía estadounidense y al mundo.

Economía:

En el ámbito económico, tanto Biden como Trump realizaron afirmaciones controversiales.  Por una parte, Biden defendió su gestión, destacando la recuperación y la creación de empleos durante su mandato, sin embargo, evadió responsabilidad por la inflación récord que azota al país y tuvo dificultades para explicar con claridad sus planes sobre impuestos y gasto social.

Trump exaltó los logros de su administración, atribuyéndose el mérito de la fortaleza económica previa a la pandemia, y culpó a Biden por la situación actual, sin ofrecer soluciones concretas ni medidas específicas al respecto. Según un análisis de la BBC (2024), Trump afirmó incorrectamente que Biden tuvo el mayor déficit en la historia y que aumentaría los impuestos cuatro veces, cuando los datos muestran lo contrario; ambos candidatos fallaron en abordar temas fundamentales como la desigualdad, la deuda pública y la competitividad a largo plazo de la economía estadounidense.

Según expertos consultados por The Economist (2024) la falta de propuestas concretas y la distorsión de los hechos económicos por parte de los candidatos reflejan una desconexión con las preocupaciones reales de los votantes y una incapacidad para ofrecer soluciones efectivas a los problemas económicos del país.

Política Exterior:

Con respecto a política exterior, las posturas de los candidatos fueron marcadamente divergentes. El candidato republicano hizo promesas audaces sobre resolver la guerra en Ucrania, afirmando que podría lograr un acuerdo de paz en 24 horas, mientras que Biden cuestionó la relación de Trump con Putin y su supuesta debilidad ante el liderazgo ruso.

En temas como Israel y Gaza, los enfoques fueron opuestos, con Trump abogando por acciones más contundentes, dejando una apertura a Israel para seguir con el conflicto y “lograr su cometido”, mientras que, Biden siguió defendiendo una posición más diplomática y moderada, sin embargo, ambos evadieron detalles sobre sus planes específicos en estas áreas, lo que generó dudas sobre la viabilidad de sus propuestas y su capacidad para ejercer un liderazgo efectivo en el escenario internacional.

Según analistas del Council on Foreign Relations, las posturas de los candidatos reflejan una falta de comprensión de la complejidad de los desafíos globales y una tendencia a simplificar problemas que requieren soluciones matizadas y a largo plazo.

Inmigración:

Sobre inmigración, Trump insistió en su dura política fronteriza, defendiendo la construcción del muro y la deportación de inmigrantes indocumentados. Mientras que, el candidato demócrata por su parte, propuso un enfoque más humanitario, pero evadió detalles sobre sus planes específicos en esta área.

Según la BBC (2024), Biden mencionó incorrectamente una disminución del 40% en cruces ilegales desde que implementó regulaciones en junio, cuando los datos muestran otra realidad. Ambos candidatos fallaron en abordar temas clave como la reforma migratoria integral, la protección de los dreamers y la atención a las causas profundas de la migración.

Según expertos del Migration Policy Institute, la falta de propuestas concretas y la distorsión de los hechos en torno a la inmigración por parte de los candidatos evidencia una incapacidad para abordar un tema que genera gran preocupación entre los votantes de la mayoría de los Estados y que requiere soluciones integrales y basadas en evidencia. Asimismo muestran preocupación por la ignorancia u omisión de los retos operacionales o logísticos que tienen las agencias de inmigración estadounidense de aprobarse las propuestas que presentaron parcialmente.

Democracia y Cambio Climático:

En cuanto a la protección de la democracia y el cambio climático, los candidatos también mostraron posturas antagónicas. Por su parte, Biden recordó eventos polémicos del pasado, como el asalto al Capitolio, y cuestionó el compromiso de Trump con la democracia. Mientras que, Trump, por su lado, defendió su legado medioambiental, a pesar de las críticas por su retiro del Acuerdo de París y propuestas en línea de establecer la exploración y explotación generalizada de petróleo en suelo estadounidense, situación que elevaría las emisiones emitidas nacionalmente.

No obstante, ambos candidatos evadieron detalles sobre sus planes específicos en estas áreas, lo que generó dudas sobre la seriedad de sus propuestas y su capacidad para abordar desafíos apremiantes que amenazan la estabilidad y el futuro del país y del mundo. Según un análisis del The New York Times, las afirmaciones de Trump sobre la integridad de las elecciones carecen de fundamento y contribuyen a socavar la confianza en la democracia, mientras que Biden no logró articular una visión convincente para proteger las instituciones democráticas. Por otro lado, expertos del Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC) señalan que las evasivas de los candidatos sobre el cambio climático reflejan una falta de urgencia ante un problema que requiere soluciones inmediatas y ambiciosas.

Desde una perspectiva amplia, el debate evidenció un primer encuentro después de cuatro años entre ambos candidatos que posicionó una diferencia tangible en el abordaje de las situaciones, no obstante, deja un sinsabor en las agendas defendidas en las que se priorizaron los ataques personales, extrapolando los temas de relevancia del debate. Biden por su parte, demostrando una debilidad discursiva que enciende alertas dentro del Partido Demócrata para nadar contra corriente dentro de la campaña electoral, mientras que, Trump se consolida a pesar de la relevancia de sus casos judiciales llevados a cabo, siendo visto dentro del espectro político como un candidato potable a pesar de sus críticas tanto personales como a su gestión.

El próximo debate se realizará el 10 de septiembre a través de la cadena ABC News, con un importante avance en el proceso electoral y ya pasadas también, las convenciones internas de los partidos en contienda. Quienes se presenten a debatir serán las opciones finales con que cuentan las y los estadounidenses al encontrarse con las urnas el próximo noviembre.

4 de julio, 2024

Elaborado por: Jose David Arias

Editado y autorizado por: Eugenia C. Aguirre